Tras dos intentos fallidos de fusión con Frontier y JetBlue, Spirit Airlines enfrenta dificultades financieras y ha anunciado planes para vender aviones y reducir su plantilla. Según su presidente, Ted Christie, la aerolínea llegó a un acuerdo con sus acreedores para reducir su deuda total y mejorar su flexibilidad financiera.
Christie aseguró que estas medidas fortalecerán la posición de Spirit mientras trabajan en iniciativas estratégicas para mejorar la experiencia de los pasajeros.
La aerolínea informó que los vuelos, boletos, créditos y puntos de lealtad seguirán operando con normalidad, asegurando a los viajeros la continuidad de sus servicios.