El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció una redada migratoria en la comunidad hispana Colony Ridge, al norte de Houston, como parte de su colaboración con la administración de Donald Trump. El operativo del lunes resultó en 118 arrestos, según el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), aunque la agencia solo reveló la identidad de un detenido.
Abbott y políticos republicanos han señalado Colony Ridge como un “imán para inmigrantes ilegales”, pese a que la comunidad, donde viven 40,000 personas, ha sido descrita por autoridades locales como un barrio común. Activistas documentaron en vivo la llegada de agentes migratorios, instando a los residentes a no firmar documentos ni hablar.
La empresa Colony Ridge Land LLC, desarrolladora del área y donante de la campaña de Abbott, ha negado las acusaciones de vender tierras a inmigrantes indocumentados. Su directivo, William Trey Harris, criticó que el Estado actúe basado en “mentiras y chismes”.
Mientras tanto, en Washington, el zar de la frontera de Trump, Tom Homan, afirmó que este operativo es solo la primera fase de una investigación más amplia, sugiriendo que habrá más redadas en el futuro.